3/3/67
Esta noche encontrarás una noche muy práctica y, sin embargo, profundamente espiritual. “Y vio Dios todo lo que había hecho y he aquí, era muy bueno. Dios reposó el séptimo día de la obra que había hecho” (Génesis 1:31; 2:2). Ahora se nos dice que este séptimo día es el día que debe observar el hombre. Es parte del acto creativo de Dios. El autor desconocido de ese versículo que acabo de citar conecta el sábado con un acto creativo de Dios. Es un ___(??) y sin él no hay creación. Y el séptimo día fue sábado de Jehová vuestro Dios y en él no haréis ningún trabajo.
He aquí un acto creativo. Si un Mandamiento se trata de manera imaginativa, entonces todos los Mandamientos deben ser tratados de la misma manera. El Antiguo Testamento es una profecía de todo lo que debe suceder en el individuo, cumplido en lo que tenemos como Nuevo Testamento. El Nuevo Testamento interpreta el Antiguo y no al revés. No se puede entender lo Viejo sin lo Nuevo. Cuando el tiempo se cumplió, se desarrolló en el individuo y tenemos lo que se conoce como el Nuevo Testamento. En el Nuevo Testamento tenemos uno de los Diez Mandamientos analizado para nosotros. "No deberás cometer adulterio. Pero yo digo que cualquiera que mira a una mujer para codiciarla, ya adulteró con ella en su corazón” (Mateo 5:27). Ha cometido el acto mirando con lujuria; es decir, imaginar el acto y desearlo es haberlo realizado, ya sea que lo hayas hecho físicamente o no. Bueno, ese es un mandamiento. ¿Por qué tomar los diez? Esto se nos da en el Sermón del Monte.