Les pido que hagan lo que hizo José, porque les estoy enseñando un principio, y los dejo a su suerte y a su propio riesgo. He contado esta historia en el pasado y siempre ha habido alguien en el público que me ha criticado por contarla, alegando que estoy llevando a la gente por mal camino. Sin embargo, siempre he tenido la sospecha de que aquellos que son más vocales en sus críticas están justificando su propio comportamiento. No les insto a que olviden todos estos supuestos códigos, sino que les digo que todos comimos del árbol del bien y del mal, y hemos sufrido desde entonces. No estoy sugiriendo que salgas y robes a nadie, o que José debe, como algunos han sugerido, devolver el dinero. Si lo hiciera, ¿a quién se lo enviaría, a Stalin? Bueno, Stalin robó todo el país, no solo unas pocas monedas como hizo José. No, José ha dado decenas de miles de dólares para ayudar a amigos y organizaciones benéficas, no para justificar su acto de niño, sino por la bondad de su corazón.

Esta publicación es solo para suscriptores de pago

Sign up now and upgrade your account to read the post and get access to the full library of posts for paying subscribers only.

Regístrate ahora ¿Ya tienes una cuenta? Iniciar sesión